Arsel Randez presentó su debut en solitario, “Piedras Negras”, en 2008. Tras sus inicios como cantante-guitarrista en el grupo Los Hijos de Jack, grupo que lideró desde el año 2003 hasta que decidió probar suerte por su cuenta, en el ya mentado año 2008. Estuvo arropado en ese inicio en solitario por músicos y productores afines a su escena musical y local como Rafael Martínez del Pozo (La JR, AA Tigre), David Loss, Juan Marigorta (Zabriskie), Aníbal Sánchez (Backliners), Eknorfu Palig (Toño ex-Los Cardiacos) y Miryam Rodríguez (ex-Olwen, Bright Baby Blues). Entre todos crearon la atmósfera idónea para que las canciones de Randez sonaran lo más puramente posible a ellas mismas y que su voz, rotunda y sincera, sonara más cerca que nunca de sus raíces.
Partiendo de ese disco en solitario reunió una banda, Los Cuervos, que tomó su nombre del que probablemente sea el tema más conocido de Arsel Randez, “Los Cuervos”, y con ellos le pudimos ver por ejemplo teloneando a la veterana banda Seguridad Social en su último concierto en la ciudad de León, entre otros muchos conciertos en los que su voz desgarrada y su visceral puesta en escena marcaron la diferencia con lo habitual en la escena local.
Ahora Arsel Randez ha decidido desnudar sus canciones de nuevo y volver al modo en el que se compusieron, voz y guitarra. Estará acompañado también por un viejo amigo al bajo, Rubén Giganto, compañero en el grupo de sus inicios, Los Hijos de Jack, con alguna posible sorpresa más a modo de colaboración. No es un final para Los Cuervos, pero es necesario para él poder tocar sus canciones de un modo más íntimo, para no perder de vista el significado de las mismas.
Como influencias reconocidas, Arsel Randez hace referencia a diversos estilos musicales, pero habla también orgulloso de nombres como Tom Waits (al que considera clave en su modo de entender la música), Bob Dylan, Nick Cave, Willie Nelson, o incluso la dama suprema del rock, Marianne Faithfull. El joven músico-cantante-crooner leonés se sirve de su profunda y desgarrada voz y sus ademanes espásticos para desplegar en potente directo su fórmula musical, un brebaje hipnótico e inclasificable que por un lado se alimenta de trovadores de la decadencia como Tom Waits, Nick Cave o el Neil Young más desidioso, y por otro se impregna de ritmos cada vez más primitivos, desde el blues rural a danzas rituales de vudú afrocaribeño, pasando por el jazz de Nueva Orleans.
Preguntado Mr. Randez acerca de "Piedras negras" comentó en su día.
"Tengo una gran banda", sonríe. "He podido contar de nuevo con Eknorfu Palig (saxo, Hammond y percusiones) , que se había metido en problemas tras la grabación de "Piedras Negras". De hecho me encargué personalmente de todos los papeleos para su liberación, aunque debieron de tratarle bien en aquel maldito agujero donde lo tenían encerrado, porque cuando fui a buscarle no estaba seguro de querer venir conmigo; es duro ser un Cuervo. A Carlos Mendes (batería) le conocí en la cola del supermercado, es increíble la cantidad de buenos baterías que he llegado a conocer haciendo la compra. Tiene una pegada espectacular, y los dos preferimos el detergente líquido al detergente en polvo, porque éste puede dejarte manchas en la ropa oscura, y es un fastidio".
"Aníbal Sánchez (guitarra, cigarbox y coros) lleva conmigo bastante tiempo. Él piensa que está en la banda por ser un buen guitarrista.... Venga ya, pero si hay al menos cinco grandes guitarristas en cada manzana de esta ciudad. La verdad es que toca con nosotros solamente porque sabe de leyes, y esta banda suele tener problemas de esa índole (y no me refiero a multas de aparcamiento, ya sabes lo que quiero decir....). Por último, Juan Marigorta (bajo) tocará con nosotros esta noche. Vino una tarde al estudio mientras grabábamos "Piedras Negras" para prestarnos unos bongos, hablamos un rato sobre nuestras colecciones de sellos, y lo siguiente que recuerdo es que formaba parte del grupo. Para cuando supe que era fan de los Beatles ya era demasiado tarde, maldita sea". |
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